Seguimos analizando a los mejores y más recordados personajes de los videojuegos en nuestro espacio de Guía Manía, y hoy le toca el turno a Frog, uno de los guerreros del pasado en el clásico de SNES: Chrono Trigger.
El éxito de este juego lo llevo a tener diferentes versiones para Play Station y posteriormente Nintendo DS, y aún hoy los amantes del RPG recuerdan la intrincada y profunda historia de Crono y sus amigos, mientras viajan por el tiempo y el espacio buscando detener la destrucción total.
Frog es un caballero del año 600AD, aunque su verdadero nombre es Glenn. Era el escudero del poderoso caballero Cyrus, pero fue convertido en sapo por el mago oscuro Magus, no antes de presenciar la muerte de su maestro a manos del mismo hechicero.
Portador de la espada mágica Masamune, Frog buscará por todos los medios vengar la muerte de Cyrus y recuperar su honor, pero no será hasta que ponga a descansar al fantasma de su maestro que conseguirá recuperar la tranquilidad.
Es un personaje movido por su pasado, por la historia trágica que llevo a su país a la ruina y a su mejor amigo a la muerte, pero la posibilidad de viajar en el tiempo junto a Crono y salvar su honor le permitirá realizar toda clase de actos heroicos a lo largo del juego.
Al encontrarse con Spekkio, Frog desarrolla poderes mágicos relacionados con el Agua, pudiendo inclusive realizar algunos hechizos curativos menores, igual que Marle.
Perseguido por la culpa, Frog lucha contra los enemigos del ejército Mystic desde una guarida secreta en lo más profundo del Bosque Maldito, pero cuando Crono y los demás le entregan la Medalla del Héroe un poco de su confianza regresa y buscará terminar con Magus de una vez por todas.
El enfrentamiento, más o menos en la mitad del juego, es excelente, ya que Frog demuestra su personalidad segura y altruista, aunque la decisión que debe tomar luego es aún más difícil: terminar con la vida de Magus o perdonarlo y aliarse para derrotar al misterioso Lavos, una figura que parece amenazar a todos los tiempos con la destrucción definitiva.