Una de las grandes críticas que suelen recibir constantemente los videojuegos es el sedentarismo que llegan a provocar en quienes los usan. Claro que con ello también viene acompañado el tema de la salud, de la poca actividad física y de su implicancia directa sobre el peso corporal de los habituales gamers. Pues bien, este delicado tema ha sido muchas veces comentado tanto por especialistas como por aficionados. Por ejemplo entre los primeros podríamos citar a los doctores Mellecker y McManus, quienes dicen que los videojuegos denominados activos traen consigo un considerable gasto de energía.
Cabe aclarar que a este tipo de juegos los comparan con aquellos otros a los que se le puede echar mano simplemente estando sentados y moviendo nada más que las manos. Precisamente en contraposición con estos últimos, con los primeros se queman cuatro veces más de calorías ya que las carreras, las simulaciones y hasta los saltos ayudan a eso. Para llevar a cabo este estudio, los profesionales siguieron de cerca de 18 niños en situaciones distintas: cuando se encontraban relajados, mientras jugaban sentados y al momento de la práctica de títulos de moderada y alta intensidad.
Claro que este trabajo ha sido llevado a cabo con otro objetivo, el cual según los propios médicos pasa por comprobar si este tipo de entretenimiento puede servir para que el paciente (jugador en este caso) pueda producir un aumento considerable en la actividad física. Obviamente que también dejaron entrever que este tipo de productos serían útiles además para combatir la obesidad.