La saga Castlevania de Konami y Koji Igarashi sigue expandiéndose, y con cada nueva entrega asistimos a saltos temporales que nos otorgan una vista bastante amplia sobre la lucha contra Drácula, los vampiros y toda clase de criaturas fantásticas.
Hoy en Guiamania, y tras una breve ausencia por algunos exámenes que ya aprobé (vamos, felicítenme, :P), abordamos la historia de León Belmont, hasta el momento el miembro más antiguo del cuál se tenga noticia en el clan de los Belmont, esta familia tan emblemática en la lucha contra las fuerzas de la noche.
Lo vimos en el juego de 2003, Castlevania: Lament of Innocence, para Play Station 2, y vivimos su aventura mientras buscaba rescatar a su prometida de las garras del vampiro Walter Bernhard.
León pierde a sus padres de muy pequeño, pero eso no le impide llegar a caballero a la tierna edad de 16 años, convirtiéndose en un guerrero formidable y en un joven noble de gran reputación en la Europa del siglo XI.
Sin embargo, cuando su prometida (Sara Trantoul) es secuestrada por el vampiro Walter Bernhard, comienza una travesía por los oscuros pasillos y habitaciones con la ayuda de un misterioso látigo bendecido con los poderes de la alquimia, que le fuera otorgado por el misterioso Rinaldo Gandolfi.
Es interesante como, hacia el final del juego, entendemos un poco más acerca del pasado del clan (como las razones por las cuáles el látigo consigue el poder necesario para eliminar a los vampiros) y además las posteriores entregas comienzan a hacer alusión a León Belmont.
Mangas, e inclusive la próxima cinta cinematográfica inspirada en el universo de Castlevania, suelen mencionar a León ya sea en murales, crónicas o simples comentarios, y es que pese a ser un juego del año 2003, Lament of Innocence y la cruzada de León Belmont supieron responder algunas preguntas que muchos jugadores quizás no se habían hecho nunca.