El Némesis T-Type es una de las creaciones más poderosas de la compañía Umbrella. Creado a través del uso del parásito NE-Alpha en la espina dorsal de un Tyrant-103, es una de las armas biológicas más poderosas de las que se tiene registro en el universo de Resident Evil.
El proyecto relacionado con la creación de Némesis proviene de la división europea de Umbrella, dedicada a investigar las posibilidades de mejorar la inteligencia y la respuesta a las órdenes de un Tyrant sin sacrificar su velocidad y fuerza bruta.
Una de las características principales de Némesis (el enemigo que le da el subtítulo Resident Evil 3 y que persigue a Jill Valentine durante casi toda la partida) es su capacidad de regeneración. Las heridas menores no tienen mayores efectos en su cuerpo, salvo aletargar su avance inexorable. Pero el punto más contraproducente de este tipo de zombi es que se torna violento e inestable.
Durante la infección de la ciudad de Racoon Umbrella lanzá a Némesis con el objetivo claro de eliminar todo rastro del equipo de policía S.T.A.R.S. que les ha estado causando problemas desde los primeros incidentes en la mansión de las montañas.
Con su fuerza y resistencia sobrehumanas, el Némesis es uno de los enemigos más complejos de la saga, aunque a medida que pasa el tiempo se descubre que su debilidad está provocada por su propia mutación. A medida que sufre diferentes cambios, hasta tres pudimos apreciar en Resident Evil 3, más partes quedan vulnerables en su cuerpo y pierde gran parte de su inteligencia, transformándose simplemente en una versión más letal del Tyrant, sin capacidad de discernir y destruyendo todo lo que lo rodea.
Su aparición en la película Resident Evil: Apocalypse es diferente, ya que aquí es en realidad Matt Addison (uno de los sobrevivientes de la mansión en la continuidad de la película). De todas maneras, se conservan las características destructivas que le dan su esencia al personaje.