La saga de conducción de Electronic Arts, Need for Speed, llega a las consolas de nueva generación con un nuevo título, SHIFT, que nos ofrecerá velocidad extrema, dejando de lado las tramas de entregas anteriores, y abogando por la conducción más arcade y frenética, disponible para Xbox 360, Play Station 3, PC y PSP.
En SHIFT los desarrolladores dejan de lado las carreras ilegales, la conducción de autos de lujo en competencias que inspiraban más a películas del estilo “Rápido y furioso” y a la conducción salvaje por sobre la técnica, para devolvernos a los primeros pasos que daba esta longeva serie.
Aferrándose en mayor medida al realismo, Need for Speed: SHIFT vuelve a las pistas en territorio urbano, a circuitos en los cuáles tendremos que aplicar nuestra pericia al volante para evitar los obstáculos pero sin molestarnos en evitar a la policía, velocidad y técnica, conjugación de lo mejor de un género.
Electronic Arts se inclina por el cambio en una serie que parecía estancarse, y lo hacen con novedades en las mecánicas del juego y con un motor gráfico pulido, fruto de más de dos años de desarrollo y con mucho esmero, dedicado a texturas suaves, escenarios ricos en detalles y capaces de darnos esa sensación inequívoca de velocidad.
El motor físico también es digno de mencionarse, dado que el realismo de los objetos, los choques y el viento, por citar algunos de los elementos con los cuales tendremos que contar, hacen de la aventura de SHIFT una experiencia inolvidable en el campo de la conducción.
Con la inteligencia artificial mejorada, lejos de esas carreras suicidas de títulos anteriores, Need for Speed: SHIFT presenta un verdadero regreso a las raíces, con las mejoras que la nueva generación permite en los apartados de jugabilidad y motor gráfico, los seguidores de las carreras estarán de parabienes, un grande esta llegando de regreso a las pistas.