Análisis de Tiger Woods PGA Tour 10

Los simuladores deportivos siguen buscando un hueco en la exitosa consola Nintendo Wii, aprovechando de maneras únicas el control con sensores de movimiento que la gran N ha popularizado.

Es así como Electronic Arts se suma a esta movida con un título de golf, que tiene como principal protagonista al golfista más reconocido de todos los tiempos: Tiger Woods.

Disponible también para Xbox 360, Play Station 3, PS2 y PSP, Tiger Woods PGA Tour 10 nos permite explorar decenas de escenarios en los cuáles practicar este singular deporte, y con las mecánicas de juego introducidas por el control de la Nintendo Wii podemos asegurar que la experiencia es única.

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Para aquellos jugadores que critican la liviandad de los títulos de Nintendo, hay que advertir que las configuraciones de PGA Tour 10 son tan variadas, que podrán disfrutar de unas partidas tanto los amantes más técnicos del golf, convirtiendo al título en un simulador completo y complejo, o los casuales, pudiendo regular la dificultad y los rangos de personalización.

Los controles son sencillos, pero existen algunas maniobras especiales, o trucos, para aprovechar al máximo cada tiro. Por ejemplo, podemos escoger el ángulo de la pelota, de esa manera el golpe tomará un efecto especial. Así, hay muchos detalles del deporte que han sido adaptados de manera profesional al modo de juego.

El apartado gráfico es espectacular, algo a lo que ya nos tiene acostumbrados Electronic Arts, con escenarios amplios y muy fluidos, donde la vegetación, la arena y los diferentes tipos de suelo se compenetran para dar una sensación de realismo muy buscada en los simuladores deportivos.

Tiger Woods PGA Tour 10 también tiene en cuenta factores del terreno, como la inclinación, o el clima, con vientos, lluvias y muchas otras variantes que nos harán sentir verdaderamente en el green.

Imperdible para los amantes del golf y para los seguidores de esta serie de simuladores, completo, complejo pero a la vez accesible a los menos entrenados.







 

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