Es lógico desconfiar de un juego basado en una película. Año tras año la grandes desarrolladoras nos decepcionan a base adaptaciones hechas con prisas, y con la única idea de promocionar el filme en cuestión y amortizar el coste de producción. Sin embargo, con X-Men Origins: Wolverine – Uncaged Edition (el subtítulo que se le ha dado a las versiones del juego para PS3, Xbox 360 y PC) parece que los chicos de Raven Software —los mismos de Heretic, Soldier of Fortune o Quake 4— han querido echar por tierra este tópico de una vez por todas y han desarrollado un juego que, si bien está basado en el reciente estreno protagonizado por Hugh Jackman, ni siquiera necesita de la película para ser un magnífico título por sí solo.
En él tomamos el papel del celebérrimo superhéroe Wolverine (Lobezno) en su búsqueda de la venganza más salvaje y brutal a través de muy distintos parajes de todo el mundo en los que nos enfrentaremos con ejércitos enteros que caerán sin remedio bajo nuestras garras de adamantium. Si bien es cierto que el juego adapta la película, los muchachos de Raven han decidido darle más matices a la historia incluyendo misiones y eventos que hasta ahora sólo aparecían en los cómics. Y ese empeño por hacer justicia a un personaje tradicionalmente mal retratado es algo que los fanáticos del universo Marvel. Pero lo que más les sorprenderá positivamente a los fans no será la historia si no el tono general de X-Men Origins: Wolverine. Y es que la ultraviolencia y el gore están muy presentes en el juego, cosa que sorprende si lo comparamos con la película en la que se basa. Pasaremos todo el juego despedazando enemigos literalmente, y las secuencias de vídeo que se intercalarán en la historia gozan de una truculencia inusitada y sorprendente.
La mecánica de juego, según hemos podido saber, se basará en complejas combinaciones de golpes (combos), movimientos, llaves y saltos que nos permitirán ejecutar maniobras de lo más espectacular y eficiente a la hora de acabar con nuestros enemigos. Además, y esto es algo que pocos esperábamos, X-Men Origins: Wolverine tiene cierto componente de RPG ya que se nos permitirá repartir puntos de experiencia para potenciar unas u otras habilidades y características que nos ayudarán en nuestra lucha.
Así pues, X-Men Origins: Wolverine es a todas luces una excelente adaptación de una película, con un apartado técnico a la altura de los más grandes de la actualidad, y un respeto por el protagonista que pocas veces tenemos la oportunidad de ver en juegos licenciados. Y es que ya lo decía uno de sus desarrolladores: «Un juego de una película que, por fin, no apesta.»