En estos tiempos en los que la publicidad lo es todo y los únicos juegos que tienen éxito son los que gozan de un despliegue mediático impresionante ocurre que de vez en cuando vemos un juego que aporta algo interesante pero que no es mencionado prácticamente. Este es al caso de Brink, un first person shooter desarrollado por Splash Damage (Quake Wars) y cuya distribuidora no es otra que Bethesda Softworks (Oblivion o Fallout). Aunque se haya retrasado para finales del 2010, concretamente octubre, creo que merece ofrecerle una especie de avance a nuestros lectores guiamaníacos.
La principal novedad de Brink es su sistema de control, sus creadores lo han llamado S.M.A.R.T, siglas para Smooth Movement Across Random Terrain lo que viene a significar “Movimiento suave a través de terreno aleatorio”. Es algo complicado de explicar, para ello tenéis el vídeo que sigue al texto pero podría poner un ejemplo que ilustraría el asunto con gran acierto, Mirror’s Edge. En Brink no existen teclas para agarrarse de salientes o saltar sino que según nos desplacemos con las teclas de movimiento y, lo más importante, al lugar al que mire nuestro personaje, se ejecutará una acción u otra. En el vídeo podemos ver como si queremos deslizarnos por debajo de unas alarmas con infrarrojos debemos apuntar al suelo mientras nos dirigimos hacia ellas o si, en cambio, queremos saltar por un bordillo debemos apuntar al mismo mientras avanzamos hacia él.
Aunque puede que no tenga más que ofrecer hay que reconocer que el sistema es bastante original y que puede suponer un avance en la jugabilidad del género, lo cual es de agradecer dado el estancamiento general. Como otro aspecto relevante podría mencionar los gráficos que, pese a no ser nada del otro mundo, tienen un look especial. Colores vivos, sin demasiados matices que le otorgan una apariencia desenfadada e intrigante al mismo tiempo.
Les recomiendo que vean el vídeo y estén atentos al juego. Puede que Brink no vaya para matrícula de honor pero su sistema de control dará que hablar.