Manuel “Manny” Calavera es otro de los emblemas de las aventuras gráficas, género que hoy en día parece querer regresar (aunque sea un poco) a su fama durante los 90, donde los juegos de PC de exploración y misterio (y muchas veces un sentido del humor excepcional) inundaban las estanterías como hoy lo hacen los FPS.
Creado por el genial Tim Schafer (quién también trabajará en otras joyas del género como Full Throttle y Psychonauts), Grim Fandango fue una de las últimas obras de la época dorada de las aventuras gráficas, y como era de esperarse la empresa desarrolladora no era otra que LucasArts.
La historia combina los policiales ambientados en los años 30 con un mundo inspirado en el inframundo azteca, llamado aquí Tierra de los Muertos, y mucho sentido del humor mientras nuestro personaje (un vendedor de paquetes del Departamento de la Muerte) se ve enfrascado en una gran conspiración.
De lo que podemos sacar en claro del juego es que durante su vida, Manuel Calavera fue un hombre bastante egoísta, llegando inclusive a decir que “no hay nadie en la Tierra de los Vivos que me interese volver a ver”.
Su constante rivalidad con Domino Hurley (otro vendedor del Departamento de la Muerte) lo llevará a enfrascarse en un viaje relacionado con negocios fraudulentos en el mundo de la muerte, y a una alianza con la misteriosa asociación de las Almas Perdidas.
Pese a su tono cansino y su actitud desinteresada, Manuel es en realidad un “muerto” que valora la amistad y que trabaja bien bajo presión, además de mostrarse siempre seguro cuando está rodeado de personajes.
Escondiendo sus inseguridades y buscando una salida a los diferentes acertijos y problemas del juego, nos terminamos encariñando con este singular personaje que representa a la muerte y trata de vender paquetes de viaje al otro mundo durante todo el juego. Gracioso, irónico e imperdible, Grim Fandango es una joya del mundo de los videojuegos para PC.