Si antes decíamos que Activision respetaba las decisiones de su asociado, Blizzard para retrasar la salida de Diablo III hasta por lo menos 2011. Ahora tenemos que ponernos en contra de las intenciones de Activision de sacar dinero a toda costa aunque sea por medios ciertamente de cuestionable moral. Todo este revuelo se ha montado tras las declaraciones del jefe económico de Activision Blizzard, Thomas Tippl (el mismo que anunció el retraso) y tiene mucho que ver con el juego online.
Al parecer les ha gustado muchísimo el éxito de World of Warcraft (vamos, que se están haciendo millonarios gracias a las hordas de suscriptores que tiene) así que están pensando en exportar el modelo económico de MMORPGs como éste a otros juegos de otras temáticas. Por poner un ejemplo muy sencillo, cabe la posibilidad de que tengamos que pagar por jugar online a Call of Duty (recordemos que pertenece a Activision Blizzard). Afirman que sería un paso muy complicado de dar pero que lo están pensando seriamente, exportar un modelo de pago a otros juegos online no necesariamente MMOs. Según las palabras del propio directivo pretenden monetarizar el juego online.
Si por si fuera poco dinero la tarifa de conexión a Internet de cualquier suministrador, pagar por el online de X-Box 360 ahora nos quieren hacer pagar por jugar en PC a títulos que no requieren de la dedicación y el mantenimiento que precisan los MMOs. Vamos que las ansias de ganar más y más dinero de compañías como esta parece no conocer límites, esperemos por el bien de los jugones que no se lleve a cabo esta alocada idea.