Tal vez algunos lo sepan, tal vez no, lo cierto es que esta serie ha comenzado con su andamiaje en la recordadísima consola SEGA de 128 bits. Por supuesto que cuando esta última dejó de aparecer en el mercado, la saga se vio en la obligación de buscar nuevos horizontes. Ha sido así justamente como terminó aterrizando en Xbox. De hecho, el producto que aquí nos reúne cuenta con una versión para la primera sobremesa de Microsoft. En concreto, estamos poniendo el acento sobre Gun Valkyrie, juego que ingresaría dentro del género de la acción y que salió al mercado allá por fines de mayo de 2002. A su vez, vale la pena recordar que su desarrollo ha estado en manos de la firma Smilebit. En lo que respecta a la trama, los protagonistas centrales vienen a ser dos, un hombre y una mujer que componen el denominado equipo Dolphin. Por un lado la teniente Kelley O´Lenmey, por el otro el mayor Saburouta Mishima. Claro que cada uno de ellos cuenta con sus propias características, mientras que a medida que vayan avanzando pueden ir mejorando considerablemente sus habilidades.
El surgimiento
Así es estimados/as, no estamos en esta ocasión ante uno de esos juegos en los que sobran las cuestiones ocultas. De hecho, ocurre totalmente lo contrario, puesto que son pocos los secretos que tenemos para revelarles desde aquí.
Pues bien, lo importante es que algo hay y como no podía ser de otra manera las vamos a compartir con todos y cada uno de ustedes. Por ejemplo, si lo que pretenden es que surja Gearskin de Kelly Nivel Tres, entonces sí o sí deberás hacer todo lo que esté a tu alcance para reunir al total de los denominados Halley Core que hay en cada una de las misiones.
Desafiando
Por otra parte, hay un desbloqueo más que no podemos pasar por alto. Se trata específicamente del Modo Reto (o Challenge, como prefieran llamarlo). Si lo que pretendes es sacarlo a la luz, entonces deberías culminar el juego por completo al menos en una ocasión para revelarlo. Consiguiendo eso tendrás la chance de volver a jugar en cualquiera de los niveles, sí esos mismos que antes te habías pasado.