Con el aluvión de títulos machacabotones de acción que se nos viene encima como Bayonetta, God of War III, Dante’s Inferno y ahora este Darksiders es complicado dedicarles el tiempo que todos merecen. El género está de moda y de ello se ha dado cuenta THQ que ha aprovechado la ocasión para hacer una mezcla tomando elementos de los referentes del estilo de juego y produciendo Darksiders Wrath of War.
En el título encarnamos a War, uno de los temibles jinetes del Apocalipsis. Al parecer alguien con ansias de sangre ha destuido el mundo antes de la fecha escrita y debemos acudir a cumplir nuestra venganza puesto que nadie hace el trabajo de un jinete del Apocalipsis. Lo cierto es que es una historia algo atípica pero que a buen seguro atraerá a más de uno, de todos modos teniendo en cuenta el género en el que nos situamos, la historia no es lo más importante del mundo y sino que se lo digan a Bayonetta.
Darksiders posee una estética muy colorista aunque sin llegar al dibujo animado cell shading. Personalmente me recuerda mucho a World of Warcraft, colores vivos, bastante planos y personajes musculados con armas gigantescas. No es que destaque gráficamente pero tiene una estética llamativa que hará que muchos de sus fallos pasen desapercibidos.
Si hablamos de mecánicas es como si ya hubiéramos escuchado mil veces la misma cantinela porque recupera muchas de las ideas de otros títulos como God of War y similares. No hay mucho lugar para la innovación en Darksiders pero es que muchos fans del género no piden otra cosa.
Está claro que no será juego del año pero es posible que nos ofrezca un buen rato de diversión. Ya ha salido a la venta para Playstation 3 y X-Box 360 y la desarrolladora se está planteando un cómic y una película basadas en su historia. Es un sacacuartos aunque el tema del cómic lo entiendo, quizás la historia es propia de ese medio pero la película acabará en desgracia seguro, ya saben como suelen hacerlas.