Los espartanos han sido la base de miles de historias contadas tanto en la literatura, como así también en el cine. Por supuesto que los videojuegos no iban a quedar ajenos a ellos. Por eso mismo, la firma The Creative Assembly se encargó del desarrollo de Spartan: Total Warrior. El mismo salió a la luz allá por principios de octubre de 2005 y se puede disfrutar a través de la plataforma PS2.
Elige el que quieras
Si eres de aquellos gamers a los que les agrada tener la posibilidad de seleccionar el nivel, entonces no puedes perderte lo que diremos a continuación. Lo primero que debes hacer es, en el menú principal, seleccionar extras pero con la particularidad de no pulsar. Una vez allí tendrás que darle entrada a esta secuencia: Izq; (lo presionamos once ocasiones) Der; (presionándolo siete oportunidades) Cuadra.
Toda la vestimenta
En tanto, también existe la posibilidad de llegar a revelar y contar con el total de los trajes. Claro, lo que habrá que hacer no es tan fácil, pero bien vale la pena el intento. Tendrán que completar sí o sí el total de las misiones.
Para ganar sin sobresaltos
Para ir culminando, nos animaremos a darte algunos consejitos para que puedas vencer sin demasiados problemas a determinados personajes. Comenzaremos con el caso de Croso. Lo primero sería que mates a los soldados romanos, para que de esa manera se incremente la energía roja que figura en una esquina de la pantalla. Cuando llegues a obtener un fuerte poder con eso, tendrás que ejecutar otro poder aún más poderoso con las espadas. Para que eso así sea aprieta L1 y Círcu, o bien L1 y X. Si lo ejecutas bien, verás que rápidamente lo vencerás.
– También sabemos cómo llegar a vencer a Beowulf. Tal como en el caso anterior, habrá que aniquilar soldados enemigos para que así la barra de energía roja se vaya incrementando. Cuando se ponga a brillar, inmediatamente habrá que hacer un fuerte poder con las espadas e ingresar L1 y X, o bien L1 y Círcu.
– Mientras que para que Ares no te complique más de lo cuenta deberías saber lo siguiente. Cuando se encuentren mano a mano, cúbrete constantemente y dale con el escudo para así lograr que se desproteja. En ese instante incrústale dos espadazos, justo cuando él quiera lanzarte el fuego deberás atacarlo con el poder de los dioses.