Los problemas que atrae el tener varias consolas

Tal vez el nombre de este artículo te parezca raro, pero es más que la verdad. Todos los gamers soñamos con tener todas las consolas de nueva generación (y pasadas) en nuestro poder, no obstante, me ha tocado ver y vivir en carne propia la mala experiencia que eso significa. ¿Por qué? Porque entre más consolas tengas, menos tiempo tendrás para jugar y terminar tus títulos favoritos en cada consola.

Hace años, cuando me compré mi Xbox y mi GameCube, tuve un «trauma» (por así decirlo, jeje), pues cada juego que compraba me lo quería acabar; sin embargo, surgieron un sinfín de problemas, de los cuales hablaré a continuación.

Una de las cosas que más me estresaba, era que a cada rato tenía que desconectar la consola que estuviera funcionando (pues sólo tengo una TV en mi cuarto) y poner la otra, lo que gasataba valiosos minutos de ocio.

Otra cosa que realmente me pone de nervios al tener varias consolas es la indecisión al no saber qué título es el que en verdad quieres jugar. Esa «indecisión» se vuelve más densa cuando se trata de dos juegos del mismo género. Lo anterior me pasaba a menudo con Metroid Prime y Halo, los cuales, en lo personal, tenían el mismo nivel técnico y de diversión (aunque ahora considero que Halo es mejor, debido a su multiplayer on-line, cosa que no pude disfrutar anteriormente, ya que no contaba con internet).

Meses más tarde (gracias a mi total estupidez) me compré una GameBoy Advance, la cual me costó unos $150 pesos mexicanos, pero eso sí, un poco maltratada aunque barata. En dicha plataforma -que la conservo hasta ahora-, me compré varios juegos, pues éstos eran muy cortos; sin embargo, me divertían muchísimo, lo que causó que se volviera vicio jugar con la portátil y dejara de usar las otras dos consolas de sobremesa. Tiempo más tarde, mi Xbox dejó de funcionar, consecuencia de la inactividad de la máquina, aunque también pudo tener algún otro motivo.

Por el miedo de que fuera a suceder lo mismo con mi GameCube, empezé a jugar con ella y fui tomándole el gusto otra vez. El tiempo «voló» y me mantuve estable con las dos consolas que tenía, hasta que llegó lo que muchos llamamos «La nueva generación de consolas». Pues me compré la Wii, y rato después la Xbox360, por lo que actualmente tengo 4 consolas en total (aunque me gustaría que fueran 5, con la PS3, pero está muy cara XD).

Obviamente, los problemas que padecí con las consolas de antigua generación los presento hoy en día. Sin embargo, ahora hay otro obstáculo que me incomoda y no me deja disfrutar de los videojuegos en paz:  la falta de tiempo. Durante el día estoy demasiado ocupado, gracias a la escuela, las tareas y el deporte que practico (aunque por éste último no me preocupo por el momento, pues estoy lastimado del pie y no puedo entrenar :P). Son muy raras las ocasiones que juego entre semana, pues terminando las tareas -si es que termino temprano-, me pongo a redactar para todos ustedes, siendo el fin de semana el período perfecto para divertirme.

Cada consola la juego alternadamente, es decir, juego una y después otra, turnándome a la vez los títulos, lo que causa que tarde varias semanas, incluso meses, en terminarme uno solo. Con toda mi experiencia les puedo aconsejar que, si bien es muy divertido tener muchas consolas, es al mismo tiempo muy estresante, y no es la mejor opción para los que están limitados de tiempo, tal y como yo 😉

Espero que este artículo les haya servido para que reflexionen un poco sobre este tema y me encantaría que compartieran sus opiniones.





    el 06.02.08

 

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