Si echáramos la vista atrás, unos 20 años en el pasado, veríamos al erizo azul de Sega, Sonic, como una de las principales estrellas de la industria del entretenimiento. Era la imagen, la cara visible de Sega y de sus consolas, en contraposición a Mario Bros, que era el “portavoz”, de Nintendo. Existía verdadero odio entre ambos, por lo que tiene gracia verlos ahora compartir juegos.
No solo se han hecho amigos Sonic y Mario, sino que la saga del erizo se ha convertido en una importante exclusiva de las consolas de Nintendo. ¡Cómo cambian los tiempos!
Sonic: Lost World es la nueva entrega de la veterana franquicia de plataformas, franquicia que ha sufrido muchos altibajos a lo largo de su larga historia, pero que en los últimos años nos había dejado buenas sensaciones, con lanzamientos interesantes como Sonic Generations o Sonic 4. Lost World llega con dos versiones distintas, una para Wii U y otra para Nintendo 3DS. Vamos a ver qué puede ofrecernos cada una de ellas.
Si bien Sonic y Mario siempre han sido grandes rivales en las plataformas, sus juegos son muy distintos, cada uno tiene su estilo propio. Mientras los juegos de Mario encandilaban a la gente con su variedad en los niveles y con sus power-ups, Sonic optaba por la velocidad. Pero, con el salto a las 3 dimensiones, los juegos de Mario fueron ganando cada vez más, todo lo contrario que ocurrió con los de Sonic, que jamás volvió a ser el mismo. En los últimos juegos del erizo, hemos notado una mejora obvia, pero siempre alcanzando el mayor nivel de satisfacción en los niveles con scroll-lateral, aquellos que emulan a los clásicos. En la versión para Wii U de Sonic: Lost World, esto vuelve a ser así, pero se nota, además, cierto interés por imitar el trabajo de Nintendo.
Los Mario Galaxy de Nintendo Wii son videojuegos fantásticos, lo mejor en la historia de las plataformas. El Sonic Team ha querido, en el Sonic: Lost World de Wii U, llenar sus niveles tridimensionales, como siempre llenos de velocidad, de elementos dinámicos y esféricos, intentando emular lo que vimos en los citados juegos del fontanero italiano. Pero lo cierto es que los chicos de Sega están, hoy por hoy, muy lejos de los maestros de Nintendo EAD, y sus niveles acaban siendo repetitivos, mientras que los objetos dinámicos son demasiado previsibles. Por lo demás, Sonic: Lost World es un juego divertido, con modo para dos jugadores y opciones online, pero que está lejos de hacer historia.
Como decíamos antes, también tenemos Sonic: Lost World para Nintendo 3DS. Esta versión es, en esencia, igual a la de la consola de sobremesa, con las diferencias técnicas que hay entre una máquina y otra, claro está. Los escenarios, la historia, y el modo de juego, son los mismos. De hecho, esta versión incluye una mejora con respecto a la de Wii U: un modo multijugador online. Pero, con todo, Sonic: Lost World para 3DS tampoco destaca demasiado en el catálogo de la portátil. Tenemos que decir, con gran pena, que el erizo de Sega se ve abocado, una vez más, a la mediocridad más absoluta.