La venta de videojuegos de segunda mano se ha convertido en una importante parte de los ingresos de las cadenas de tiendas centradas en el ocio electrónico. La posibilidad de hacerse con títulos prácticamente nuevos por un precio muy reducido es demasiado golosa para que los jugadores se resistan.
Pero esta práctica por parte de los comerciantes está causando una gran polémica, al denunciar muchas desarrolladoras que les perjudica claramente, ya que cada vez hay menos jugadores que compran los juegos nuevos. Ahora muchos esperan un tiempo hasta poder adquirirlos a un pecio menor.
Al igual que en el pasado se han llevado a cabo algunas estrategias para evitar la piratería, los fabricantes de consolas podrían estar barajando opciones para evitar el uso de títulos de segunda mano. Hace tiempo que vienen surgiendo rumores sobre las características de las próximas consolas de Sony y Microsoft, las cuales, según dichos rumores, llevarían un bloqueador de juegos “seminuevos”.
Kotaku publica hoy nuevos rumores sobre PS4, haciendo referencia a una fuente “muy fiable”. Estos rumores insisten sobre el hecho de que la consola no reproduciría juegos de segunda mano, y tampoco sería retrocompatible, o sea, que no se podrían utilizar en ella juegos de las anteriores consolas de la gama PlayStation.
La forma de impedir a un jugador usar un título de segunda mano sería, de ser esto cierto, vinculando su copia a su cuenta de PlayStation Network. Esto implicaría que los videojuegos dejarían de poder ser prestados o intercambiados con amigos.
Dentro de Sony, se estaría dando a PlayStation 4 el nombre en clave Orbis, y sus primeros kits de desarrollo habrían sido ya distribuidos entre los estudios colaboradores más importantes.
En cuanto a técnica, se ha filtrado que la nueva consola de Sony usaría una CPU AMD x64 y una GPU AMD Southern Islands. Se alcanzaría una resolución de 4096×2160 y se mostrarían los juegos 3D a 1080p.