Da hasta miedo ver las nuevas tecnologías gráficas que surgen cada poco tiempo, parece que dentro de poco no podremos distinguir virtualidad de realidad. El último salto gráfico lo vimos con el CryEngine 2, Crysis y DirectX10, unas auténticas maravillas que nos mostraron agua hiperrealista, vegetación que se deformaba a nuestro paso, entornos destruibles y una física de infarto. Ahora las bases ya están asentadas para la llegada del siguiente salto, DirectX11. Los desarrolladores ya están corriendo a toda velocidad para adaptar sus videojuegos a las nuevas posibilidades que ofrece la nueva librería gráfica de Microsoft para PC. Un ejemplo visible de ello es Dirt 2.
En el vídeo que acompaña a este artículo pueden ver el duro trabajo que ha realizado Codemasters con este gran juego de conducción. Los efectos son impresionantes, una iluminación bastante lejana de las exageraciones vistas hasta ahora, todo es extremadamente realista y los brillos y reflejos se encuentran en sus justa medida. Cabe destacar el público presente, nada de modelos super básicos, ahora vemos estructuras complejas y una gran variedad de animaciones una auténtica barbaridad. No obstante, los efectos de partículas, el polvo levantado y la tierra que sale despedida son dignos de mención especial. Es como si nos estuvieran echando el polvo encima, es como verlo en la realidad.
Perdonen que me emocione pero es algo que hace 15 años era realmente impensable, supone mucho trabajo pero ahora están los resultados. Quería dejar lo último para el final y esto es, sin lugar a dudas, los efectos de deformación del agua. Cuando pasa el coche y las ondas se desplazan no se puede evitar dejar la boca abierta, todo es en tiempo real, increíble. Mejor dejo de hablar del tema, juzguen ustedes mismos.