Hacia a fines de agosto último, más precisamente el día 27, salió a la venta un título que le vendrá como anillo al dedo a aquellos gamers que se consideren amantes de los misterios y las investigaciones. Hacemos alusión a Sherlock Holmes: Mystery of the Mummy, el cual ha sido desarrollado por los muchachos de Frogwares y editado por la gente de Digital Bros. El género del que formaría parte sería el de aventura y se lo puede disfrutar a través de la plataforma Nintendo DS.
Lo primero que se debe remarcar es que este título es heredero directo de aquel que apareciera para PC hace unos seis años atrás, Sherlock Holmes: el misterio de la Momia. Aunque los aspectos entre una y otra versión se mantienen, hay que decir que encontramos igual ciertas diferencias. En el juego de la portátil, por ejemplo, observamos que se pone el acento en las comodidades que la misma entrega para este tipo de productos, aunque no serán precisamente pocos los que extrañen la aventura gráfica de estilo clásico debido a que aquí eso se desvirtúa bastante. De hecho, y puntualmente, la resolución de los puzzles serán más que fáciles, y mucho más aun si el usuario le echa mano a la guía paso a paso que el título ofrece.
Por supuesto que la cultura egipcia es elemental y base fundamental de este título. Una tal Elisabeth, nos va a llamar para que podamos rastrear y ubicar a alguien llamado Montcalfe, que viene a ser un Lord que coleccionaba antigüedades pero que se mantiene desaparecido. Para ello deberemos acudir a una gran mansión, en la que la búsqueda de pistas será elemental para conseguir el objetivo. Lamentablemente, aunque con el stylus nos podremos mover con ligereza por los escenarios, las dificultades llegarán cuando intentemos localizar las pistas, ya que la poca nitidez nos jugará en contra. Otro punto negativo pasará por la poca utilidad que le daremos a la doble pantalla, a la que sólo le echaremos mano en algunas escenas introductorias o en ciertos puzzles. Por suerte, elementos tales como el diario de viajero o la libreta para hacer anotaciones continúan estando y nos darán muy buenos resultados si los usamos como se debe.
Por otra parte, su apartado gráfico también deja bastante que desear. Las animaciones casi brillan por su ausencia y los gráficos planos que aparecen en las diversas ilustraciones no hacen otra cosa que mostrar una falsa sensación de tridimensionalidad. Y ni hablar de la cuota de detalle de los distintos componentes o elementos que forman parte de los escenarios, su floja textura y escasa definición parece que nos hicieran retroceder varios años en el tiempo. Tal vez lo mejorcito de este apartado sea la ambientación que se le da a la mansión en la que pasaremos la mayor parte del tiempo. Y, hablando de tiempo, seguramente que a aquellos que estén ya familiarizados con juegos de este tipo de aventura, Sherlock Holmes: Mystery of the Mummy no les llevará más que ocho horas para conocer el final. Si bien tiene algunos puntos interesantes, eso no alcanza para considerarlo ni siquiera bueno.