Supongo que todos conocerán lo que es una flashcart, en este caso me refiero a las de la portátil de Nintendo, la Nintendo DS. Para quien haya estado un poco desconectado y no sepa a qué me refiero se trata de unas tarjetas que se conectan al slot de juegos de la consola y que es capaz de cargar copias de seguridad (al fin y al cabo, juegos pirateados) y software casero o homebrew en la consola. Durante todo el tiempo que ha estado Nintendo DS en el mercado no han parado de lanzar tarjetas de estas características y la piratería estaba afectando seriamente a la consola, el hardware se vendía como churros, no hay más que ver las cifras de ventas de la consola estos años pero el software apenas se vendía.
Ahora ha sido lanzada la Nintendo DSi, consola con muchas más capacidades multimedia, más cercanía a Internet y a actualizaciones constantes. Al principio no había flashcarts compatibles pero simplemente fue cuestión de tiempo que aparecieran y así lo han hecho. Nintendo, a modo de contraataque, ha hecho que en la reciente actualización de la consola viniera a modo de acompañamiento un sistema que impedía a estas tarjetas funcionar de ninguna manera. Entre las tarjetas bloqueadas están las más famosas: R4i, iHyper, EZVi y un largo etcétera.
Está claro que vuelve a ser cuestión de tiempo que las compañías responsables de las tarjetas lancen nuevas actualizaciones que salten estas protecciones, es la pescadilla que se muerde la cola, el juego del perro y el gato. Son unas tarjetas con un éxito enorme y resulta un negocio altamente rentable.
Por supuesto, la piratería hace daño, eso es obvio pero el homebrew, es decir, los programas o juegos caseros no. Es más, desarrollar este tipo de software permite aprender y ganar conocimientos a toda la comunidad y me parece injusto que traten de impedirlo.