De la mano de Sucker Punch, una desarrolladora afincada en Washington que aún no se ha estrenado en esta generación, nos llega la próxima semana inFamous, un sandbox postapocalíptico exclusivo para PS3 en el que llevan cuatro años enfrascados y que promete convertirse en uno de los máximos «vendeconsolas» del año si cumple las expectativas que está levantando.
La premisa principal es simple: controlamos al joven Cole MacGrath, un mensajero corriente y normal que se ve atrapado en una gigantesca explosión que arrasa gran parte de la ciudad y, por avatares del azar, le concede a Cole el increíble superpoder de generar y manipular electricidad. A partir de ahí, deberá ser el jugador quien siga desarrollando las habilidades del personaje y, aún más importante, quien tome las decisiones morales que terminarán afectando tanto al personaje como a la trama.
Si en Fable 2 ya se planteaba la posibilidad de ser buenos o malos según asumiéramos las consecuencias de nuestros actos, en inFamous esta dualidad se acentúa aún más si tenemos en cuenta que los muchachos de Sucker Punch han optado por implementar un sistema de karma que tendría una incidencia de hasta quince giros de guión a lo largo de la historia del juego.
inFamous será, como apuntaba más arriba, un sandbox, es decir: un juego en el que se nos dará libertad en un entorno limitado para elegir las misiones y su órden, o bien para divertirnos sin seguir ningún hilo argumental, al estilo de la saga Grand Theft Auto o el infravaloradísimo y brillante Crackdown. La otra gran baza de este título serán las plataformas, ya que una de las formas de aprovechar nuestros poderes —quizá la que más utilicemos desde el principio— será el ejecutar saltos sobrehumano y planear por el aire para aterrizar suavemente donde creamos conveniente.
Técnicamente, inFamous será lo que en la industria suele llamarse «un AAA«, es decir, que sus capacidades gráficas estarán a la última y que su aspecto será digno de una superproducción videojueguil. Con una ambientación sorprendentemente realista, con un especial cuidado por el detalle y el entorno, y, sobre todo, unos valores de producción a la altura de lo exigible, inFamous promete convertirse en uno de esos juegos que no pasarán desapercibidos en un catálogo tan preocupantemente escaso en excelencia como el de PS3.