Que tire la primera piedra aquel que no haya bajado jamás un videojuego pirata de Internet. Es una práctica común, no ya en términos de software lúdico, todo el mundo baja programas, música, libros o películas de la red sin pagar cuanto valen a sus legítimos dueños. ¿Creéis que esta práctica puede considerarse un acto delictivo, un hurto, o no os preocupa demasiado la hipotética falta de moralidad que implica descargar propiedades intelectuales de internet sin el consentimiento de su autor?
Hay posturas divergentes dentro de esta polémica, difícilmente llegaríamos a un acuerdo sobre si está bien o mal jugar a juegos piratas. En todo caso, como no existe ningún riesgo legal a la hora de hacerlo, no nos preocupa demasiado. Pero si fuéramos japoneses tendríamos que andarnos con mucho ojo, por que quizás podríamos llegar a ir a la cárcel.
El país nipón es uno de los que menos azotados se ven por la lacra de la piratería. Los japoneses son gente muy distinta a nosotros, tienen un concepto del honor muy arraigado. Y tampoco ayuda mucho, dicho sea de paso, la dureza de las leyes que hay en ese país para esta materia. Desde 2.009, todo aquel que baje material intelectual ajeno de Internet corre el peligro de llevarse a su casa una bonita multa. Para eso, casi que sale mejor comprarse el juego verdadero.
Pero la cosa empeora en Japón. Desde octubre, la subida de música, vídeos y otros materiales con copyright a Internet esta penada con castigos que pueden llegar hasta los 10 años de carcel, y multas que pueden alcanzar los 10 millones de yenes. Pero no solo los que se lucran con ello corren el peligro de ir a la cárcel. Aquellas personas que descarguen contenidos subidos ilegalmente se enfrentarán a penas de hasta 2 años, y multas de hasta 2 millones de yenes.
Y es que, a diferencia de lo que ocurre en algunos países occidentales, la industria discográfica de Japón aun tiene mucho poder, pues es uno de los pocos países en los que los CDs de música aun tienen unas ventas considerables, a pesar de ser bastante más caros que aquí.
La cosa está dura en ese país, pero por occidente ya hemos visto una lucha encarnizada contra la piratería, cierres de sitios y detenciones de sus responsables, como por ejemplo, el caso de Megaupload. ¿Llegará un día en el que ya no podamos bajar un solo juego pirata de Internet? ¿Tendremos que acostumbrarnos a gastarnos 70 dólares por cualquier juego que queramos probar, o la piratería se abrirá camino, como lleva haciendo desde tiempos inmemoriales?