Si bien los cambios pueden llegar a ser desfavorables y perjudicar más de la cuenta, hay casos en que los mismos resultan realmente saludables. Precisamente esto último es lo que ha ocurrido con Juiced 2: Hot Import Nights, el cual, al menos en la plataforma Xbox 360, se ve en muchos aspectos mejorados respecto de su anterior versión.
La primer gran variante que veremos es la de ya no competir más en los típicos terrenos salvajes y callejeros, sino que ahora correremos de manera legal. Por otra parte, al piloto lo podremos personalizar a gusto nuestro, eligiendo por ejemplo su sexo, su color de piel y hasta su vestimenta.
Claro que esta especie de tuneo no se limitará nada más que al personaje, ya que lo propio tendremos la chance de hacer con el coche. Los cambios a realizar en este aspecto serán variados y numerosos, pero para no ahondar demasiado en ellos sólo citaremos algunos tales como, las llantas, el capó, los asientos, el tablero, el volante, el techo y los pedales.
Por supuesto que, al tratarse de un juego realizado para las máquinas de nueva generación, presenta un aspecto técnico más que interesante. El modelado de todos y cada uno de los coches es altamente realista, con un diseño compuesto de texturas notables. También resultan atractivos los distintos efectos, sobre todos los de luz y los que se generan luego de algún pequeño roce con el rival.