Aunque desde hace un par de semanas se manejaba que el Brawl se iba a atrasar un poco en América, el día de hoy esto quedó confirmado. Ya aparece en el Dojo la nueva fecha de salida a la venta, que es el 9 de marzo. Como excusa, aparece un mensaje indicando:
«Debido a retrasos en la terminación de Super Smash Bros. Brawl, hemos tenido que cambiar la fecha de salida a la venta del juego al domingo 9 de marzo. Me disculpo profundamente con las personas que han estado esperando jugar el juego desde hace tanto tiempo y les pido que se esperen un poquito más. Gracias por su paciencia».
Sin embargo, lo que me duele no es tanto el hecho de que hayan atrasado el juego, sino que lo anuncien hasta ahora. Desde hace dos o tres semanas, las tiendas de videojuegos en Estados Unidos empezaron a cambiar a marzo la fecha de salida de este juego, mientras que Nintendo seguía insistiendo que saldría en febrero. Todo esto me hace suponer que Nintendo ha estado manejando dos posturas: una hacia el público y otra hacia las tiendas. Si le había dicho hace tiempo a las tiendas que cambiaría la fecha a marzo, ¿por qué no también decírselo al público en general?
Por el momento, sólo nos queda esperar que el juego no se vuelva a atrasar. Recordemos que en Europa todavía no tiene fecha de salida, mientras que en Japón el sitio oficial del juego indica que saldrá el 31 de este mes. A no ser que la versión Americana vaya a tener mejoras sobre la versión japonesa, queda sin fundamente lo que dice el mensaje que explica el retraso, ya que si el juego sale a la venta en japón en 15 días, eso significa que ya se ha terminado de programar el juego. Por lo tanto, el retraso podría deberse no al juego en si, sino a la traducción del mismo o a que Nintendo de América todavía no está preparada para el modo online de un juego que muy probablemente se convertirá en el más vendido del año. La compañía todavía necesita trabajar en reducir el lag que se experimenta en juegos como el Mario Strikers.