Este 22 de Noviembre se cumplen dos años del lanzamiento de la Xbox 360º en el mercado Norteamericano (siendo el 2 de Diciembre el lanzamiento en Europa) y muchas experiencias se han logrado desde aquel mítico día en que la consola blanca llegó a las manos y mentes de los videojugadores.
A estas alturas, la consola se ha posicionado como todo producto de Microsoft se merece. Las ventas están bien establecidas y aunque se sabe de los problemas técnicos con los que, hoy por hoy, cuenta la Xbox 360º, está sigue siendo el placer de muchos videojugadores por toda la esfera en este mundo de la guerra de las consolas.
Grandes títulos se han lanzado ya para la Xbox 360º, considerándose estos entre la mayoría de los gustos personales de cada videojugador. Call of Duty 3, DOA 4, FIFA 07, Final Fantasy XI y Gears of War, por mencionar algunos, son títulos que han marcado el buen paso de Microsoft en su nueva incursión en esta guerra.
Los números, queda claro, son variables. Hay quienes sitúan a la consola de Bill Gates como la número uno en ventas en América y Europa, como lo mencionan las encuestas de NexGen Wars en las que la Xbox 360º cuenta ya con 11,457,465 consolas vendidas, y contando. Y aunque es importante recalcar la diferencia de tiempos en que las consolas de 7º generación fueron lanzadas al mercado, no cabe duda que la 360º sigue manteniendo cierto margen mayor de aceptación por parte del público mundial gracias a su relación calidad/costo.
Y aunque lo cierto es que Microsoft ha errado algunos pasos desde el lanzamiento de la consola, como ha sucedido con el descubrimiento de que todas y cada una de las unidades vendidas al día de hoy tienen el defecto popularmente llamado red ring of fire , todo parece indicar que Microsoft se está ganando un lugar bien establecido en este mercado que hasta hace algunos años (antes de la llegada de la Xbox) era dominado por los productos de los dos grandes: Nintendo y Sony.
Y es que no queda duda que Microsoft seguirá ganando terreno en este campo, puesto que la calidad de la consola en sí misma y su catalogo de juegos no es de reprocharse, aún y con la velocidad descomunal con la que uno de sus competidores, el Wii, comienza a avanzar entre el público de todas las edades.
Al final de cuentas, la guerra de las consolas solo arroja un ganador: el consumidor final, pues entre más debate exista sobre quién es el verdadero ganador de esta guerra, los competidores tratarán de esforzarse más por ofrecer un mejor producto, lo que redundara en más y mejores opciones para el videojugador. Y esto es, al final, lo que más beneficia a este mercado que hoy por hoy, va ganando terreno fértil en el campo del entretenimiento.