Game Boy Advance es la corona con la que Nintendo re-activó su reinado de consolas portátiles, apoyándose en Game Boy Color y en la multimillonaria e innovadora saga Pokémon (ver Game Boy Historia). De esta forma, Nintendo decidió apostar fuerte hacia una nueva era de la eterna Game Boy, con este propuesta "avanzada", y a la que luego le seguiría la Nintendo DS, con dos modelos especiales entremedio: Game Boy Advance SP y Game Boy Micro.
Con títulos como Advance Wars, Pokémon Rubí/Zafiro/Esperalda, Metroid Fusion, Golden Sun, Fanal Fantasy Tactics Advance, Zelda The Minish Cap, y Mario Kart Super Circuit, entre tantos otros, la Game Boy Advance se consolidó rápidamente, sin darle ninguna oportunidad a la Nokia N-Gage de ganarle a la industria dominada por Nintendo.
Originalmente presentada en la primera parte del 2001, GB Advance salió unos tres años después de la GB Color, y en ambos casos, el título que mayor ventas le significó a cada consola perteneció a la serie Pokémon: en GB Color fue Pokémon Gold/Silver/Crystal, mientras que en GB Advance los aplausos se los llevó Pokémon Rubí/Zafiro. Una vez más, Pokémon fue la clave de la victoria de Nintendo, más allá de que cada nueva versión no hacía otra cosa que repetir la fórmula original, con algún que otro agregado en el entorno gráfico y en la jugabilidad.
En el siguiente video, se puede apreciar lo mejor de Pokémon Ruby:
Con GB Advance, Nintendo dio un giro sobre el aspecto de su clásico portátil. En lugar de plasmarse de manera vertical, lo hizo de forma horizontal, tendencia que siguió con DS, centrando la pantalla en medio de los botones de acción principales y aquellos de dirección.
Hoy, la Game Boy Advance es parte del pasado de la industria de los videojuegos, pero pareciera que fuera ayer cuando en GuiaMania la vimos aterrizar por primera vez, generándonos una infinidad de expectativas que lograron cumplirse con el paso del tiempo, gracias a títulos que verdaderamente supieron aprovechar la capacidad técnica de la portátil. Game Boy Advance y Game Boy Color significaron dos etapas muy importantes para el desarrollo de Nintendo en esta pequeña línea, sirviendo de puente para la llegada exitosa de DS, e incentivando la explotación de un mercado al que solamente Nintendo estaba apostando, lo cual se demostró con la Sony PSP.